Había sido internado el sábado por la noche debido a un cuadro de cólicos renales.
El sábado por la noche, Máximo Kirchner había sido internado en el Hospital Italiano de La Plata presentando un cuadro de cólicos renales. Más allá de eso, en el parte médico, se había indicado que tenía un “buen estado general”. Tanto es así que ahora ya recibió el alta.
El problema que había tenido exactamente el hijo CFK fue, según el médico Roberto Martínez «un cuadro agudo que se interpreta como cólico renal, diagnosticándose mediante estudio de imágenes perinefritis incipiente y litiasis de 3 mm intravesical».
El nuevo parte, publicado a las 18, informa que “luego de una buena evolución clínica y respuesta terapéutica, se otorga el alta de internación del paciente”. Además, amplía: “Sigue controles y tratamiento ambulatorio”.
